Historia de una superación
León y olvido
León y Olvido es una película dirigida por Xavier Bermúdez que cuenta la historia de los hermanos León y Olvido. León es un chico que padece síndrome de Down y que al principio de la historia se encuentra interno en un colegio especial, Olvido es su hermana mayor. Los dos son huérfanos y Olvido tiene que cuidar de su hermano León, una tarea pesada de la que no quiere tener nada que ver, ella quiere vivir su vida tranquilamente sin más preocupación que ella misma, y su hermana es un obstáculo en su camino para conseguirlo. León, como todo enfermo de síndrome de Down, es una persona muy alegre y cariñosa, que busca el afecto de su hermana a la que adora por encima de todo, pero que busca que esté pendiente de él cuidándole constantemente. A pesar de que León busca la atención de su hermana y esta librarse de él, la forma de ser de León consigue ablandar en muchas ocasiones a Olvido que no puede evitar, aunque sea muy en el fondo, a quererle con todo su corazón. Pero los problemas económicos que sufren hacen que aumente tanto la tensión hasta el punto en el que Olvido trata de matar varias veces a León, todas ellas sin éxito.
La película consiguió atraparme desde el primer momento, por motivos personales he conocido la situación que pueden vivir las familias con uno de sus miembros enfermo de Down, y esta historia me resulto muy tierna a la vez que cómica. Todas las veces que he podido ver a una persona con síndrome de Down eran como tratar con un niño grande (como resultado de su enfermedad que presenta un retraso mental), pero un niño feliz con rabietas intensas.
El hecho de que me atrapase tanto la película ha sido la capacidad que tenía León de vivir la vida. Quiero decir, dejando aun lado los rasgos físicos asociados a la enfermedad, no podría decir que León padecía síndrome de Down si no conociese las características de la enfermedad en el ámbito psicológico. Una de las características comunes es que, al ser como un niño, buscan la atención, que se ocupen de ellos… León solo muestra ésto al principio de la película. Según avanza la historia, León va tomando responsabilidades poco a poco, desde empezar a ir y volver del colegio solo, hasta buscar un empleo. ¿Pero por qué este cambio? La respuesta está en la otra característica y la que mayor papel desarrolla en la actitud de León, esa tendencia al cariño y el amor. León llega a darse cuenta de que supone una carga para su hermana, que supone gastos extras y que su hermana se desloma por cuidarle. Pero estos actos no son los que muestran en toda su magnitud hasta donde puede llegar esa necesidad de recibir y dar cariño. Olvido trata de matarle, varias veces, y León lo sabe. Sabe que cuando se marcho con el coche dejándolo tirado en medio de la nada no se había olvidado de él, sabe que ella le preparó a propósito un zumo con una sobredosis de todas las pastillas que podían tener, sabe que cuando le estaba disparando con el revolver estaba disparándole a matar… y a pesar de todo seguía ahí. Una persona, si se me permite decirlo, “sana” se abría ido en el primer intento, pero León no lo hizo, se aferraba a ese sentimiento de amor que mostraba Olvido de vez en cuando, la ayudaba, la quería y la perdonaba a pesar de todo (puede resultar algo chocante ver a León bromear con la situación en la que su hermana le apuntaba con el revolver y le disparaba). León buscaba actuar como una persona normal para no darle más preocupaciones a su hermana.
La enseñanza parece, como en muchas películas que el amor lo puede todo, y podría pensarse eso, pero esa es la única enseñanza que verían los niños pequeños. Aquí se muestra que una enfermedad de este tipo puede suponer una barrera, un muro que a veces se levanta sobre nosotros… pero que es franqueable, con paciencia y fuerza de voluntad. Este tipo de enfermedades poseen un amplio abanico de intensidades y unas requerirán más trabajo que otras, pero siempre se puede llegar a ese objetivo que es poder llevar una vida digna y normal.
